sábado, 18 de abril de 2009

¡Me revienta cuando adivino! (II)

Hay cosas que no pude adivinar. Una de ellas ha sido el extrañísimo fenómeno de "conversión" del Poder Judicial. Hasta hace muy poco -y por muchos años- todos los medios y las encuestas estaban más o menos de acuerdo en que la inmensa mayoría de los magistrados era corrupta. ¿Recuerdan la inmortal frase de Oscar R. Benavides cuando le mostraron el recientemente construido Palacio de Justicia? "Mucho palacio para tan poca justicia". ¡Qué gracioso! Ahora resulta que los jueces son poco menos que arcángeles. Claro que sí. No de otra forma puede justificarse el linchamiento.

Desde mis años universitarios ya era sabido que los últimos de la clase, los que sacaban las peores notas y se graduaban con las rejustas, no podían ejercer liberalmente la profesión (se morirían de hambre) y se refugiaban bajo el paraguas del sueldito en el Poder Judicial. Eso era un axioma.

El 70%:- Y ahora me entero que el 70% de los magistrados peruanos son egresados de la peor universidad -no diré del planeta- del Sistema Solar: la Universidad de San Marcos, de la cual todos sus graduandos son de izquierda. En suma, de cada tres vocales, por lo menos dos son furibundos antifujimoristas, antisistema, pro terrucos y cuanto de mal hay contra el Perú. Y esto también se aplica a la Sala que va a recibir el recurso de nulidad presentado por Fujimori. Y a propósito, me dicen que uno de sus miembros integrantes es la doctora Elvia Barrios. Me cuentan que fue separada de la Corte Superior de Justicia de Ayacucho. ¿Será verdad? ¿Y por qué sería? Valdría la pena averiguarlo. En un juicio como este no se pueden dejar piedras sin revolver.

San Martín:- A propósito de lo dicho en el parágrafo anterior, en mi artículo del sábado pasado me referí a un vocal al que Fujimori había sacado a chotes del Poder Judicial. Sí pues, se trata nada menos que del doctor San Martín, el mismo que ha integrado la Sala que acaba de condenar a Fujimori a cadena perpetua. Este personaje (San Martín, no Fujimori), antes de ser reintegrado al Poder Judicial, me dicen que trabajó nada menos que con el megadóntico, macrodáctilo e inefable doctor Ugaz, cuando éste era procurador encargado de extraditar a Fujimori. Así, San Martín ha sido poco menos que fiscal, defensor de la parte civil y juez, todo en uno. ¡Por los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo! ¿Es que aquí no se investiga a nadie? ¡Que alguien niegue lo que acabo de afirmar! ¡Lo pido por la Bienaventurada siempre Virgen María! ¡Por favor, no me digan que en esta cagada de país hay, hubo o habrá justicia alguna vez! Este "megajuicio del milenio", que le dicen, no es más que otra triste payasada a las que ya deberíamos estar acostumbrados.

El autor mediato:- Valiente pendejada esa de la autoría mediata.

Claro que sí. El eterno cuento de que Fujimori "tenía que saber" lo que hacían todos y cada uno de sus subalternos, porque él era el Comandante General de las Fuerzas Armadas y las Fuerzas Auxiliares, el "men", el "tai pan", el "capo di tutti capi", omnisciente y omnipotente. Ya pues, ¿no creen que ya es tiempo que se declare a Fernando Belaunde como traidor a la patria porque, aplicando la misma teoría, "debió haber sabido" de las matanzas de su comandante "Camión"? ¿Eso no fue "autoría mediata"?

¿Y qué me dicen de Alan García? ¿No creen que debe ir preso por el "gasolinazo" de los tombos? ¡Vamos! Alan "tenía que saber" que algunos generales de la Policía se andaban tirando la gasolina. ¡Claro que sí! Y no menciono la operación de higiene que hizo en los penales. Tampoco la liberación masiva de terrucos en el abominable "gobierno de transición" cuyo tetelememe máximo nos puso en manos de la gusanera comunista mundial. ¡Hay sepulcros que deben desaparecer, carajo!

¿Y no creen que habría que echar de su cargo a Ántero Flores por la torpe operación que produjo la muerte de 15 soldados hace unos días? Por supuesto: él "tenía que saber" que esos soldaditos no fueron más que reclutas con poquísimo entrenamiento, comandados por oficiales idiotas. Salvo que esos terrucos "sólo hayan sido abigeos", claro.

¿Qué espera Alan para inculcarle a su bufalería -como lo hizo antes en su desgraciado primer gobierno- "la entrega, el sacrificio y la mística de los senderistas"? ¿Por qué no envía a ese ridículo "patriarca", "El Zapatón", a que coloque ofrendas florales en las tumbas de los gloriosísimos "peruanos equivocados" que murieron -de puro estúpidos que fueron- en la embajada del Japón? Y quizá unas cuantas calas sobre las osamentas de las "víctimas" de Barrios Altos y La Cantuta... cuya pertenencia o colaboración con el terror ya ha sido demostrada. Y de paso -y para hacer el tundete- que esos arrogantes peliculineros construyen su monumento al terror, el despreciable "museo de la memoria".

Recuerden ese antiguo refrán que dice: "En la amistad boliviana, mujer chilena y justicia peruana, nunca debes confiar". Esta paremia no es del todo exacta. Conozco magníficas mujeres chilenas y tengo grandes amigos bolivianos. En cuanto a la justicia peruana, bueno, conocí a muchos magistrados decentes y verticales. Desgraciadamente ya han muerto todos. Espero que alguien me presente a un juez impoluto. Estoy seguro de que deben haber varios, pero no los conozco.

La justicia peruana no me da risa. Me produce arcadas. Es por ello que dejé de ejercer la profesión de abogado un par de décadas atrás.

Hasta más vernos.

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